Cada año se registran cientos de casos de asalto y acoso sexual en el estado de Arkansas, y aunque existen organizaciones dedicadas a crear conciencia y educar sobre el tema, aun siguen sumándose víctimas.
Los depredadores sexuales están en cualquier lugar, muchas veces disfrazados de amigos, y pueden ser familiares, vecinos e incluso maestros. Los expertos aseguran que en la mayoría de los casos la víctima conoce a su agresor, y estos se van acercando, siendo amistosos con sus presas.
Casey Atwood, representante del Children’s Safety Center, explicó a las cámaras de Univision Arkansas que aunque estos casos son muy sonados en nuestra area, los programas de prevención y educación están ayudando a concienciar, y permitiéndole a miles de pequeños a sentirse seguros y cómodos a denunciar estos casos.
«Hay depredadores sexuales en todas las comunidades, y no discriminan. Normalmente se encuentran en lugares donde tienen acceso a niños, para poder obtener su confianza y la de su familias, y así poder engañar a los pequeños. No creo que necesariamente haya un incremento, pero si hay un aumento en concientización que ha permitido que los niños se sientan seguros a denunciar.”
Atwood también recalcó que dichos problemas de abuso sexual tienen un impacto significativo en nuestra sociedad.
«Cuando un menor esta siendo abusado sexualmente, esto afecta a nuestra comunidad con muchos costos. El problema ocurre cuando alguien no denuncia lo que esta sucediendo y no hay una intervención, al no hacerlo puede que sufran enfermedades físicas, embarazos precoces, suicidios, adición de drogas, y todo esto afecta a nuestra comunidad”.
Aunque la mayoría de los casos que salen a relucir en Arkansas sobre depredadores sexuales involucran a un mayor de edad, incluyendo a ancianos, Atwood mencionó que entre ellos también hay jóvenes dañando a menores de edad.
Con esto, cabe recalcar que es importante educar a sus hijos sobre estos temas tan delicados, y aprender a cómo sobrellevar el problema.
