El entrenamiento con fuego real les enseña a los bomberos cómo pensar con claridad y actuar con calma bajo el estrés de una situación de emergencia cuando hay vidas en juego y cada segundo cuenta. Deben usar su capacitación de manera efectiva para resolver los problemas únicos de una emergencia de incendio mientras mantienen su propia seguridad, así como la de sus compañeros bomberos y cualquier otra persona involucrada en la escena del incendio. No hay mejor manera de dar a los bomberos una lección práctica de extinción de incendios que a través de este tipo de ejercicio controlado y supervisado.
Durante el entrenamiento, los bomberos recibieron entrenamiento a través de escenarios interiores de quema viva que eran ofensivos a defensivos. Después de que se realizaron las quemas interiores, comenzó la quema completa de la estructura. Durante la quema completa, los bomberos recibieron instrucción mientras trabajaban con mangueras y otros fueron capacitados en el funcionamiento de los aparatos.
El entrenamiento práctico de quema viva les dio a los bomberos la oportunidad de aprender nuevas habilidades que son vitales para proteger la propiedad y practicar sus habilidades para combatir un incendio estructural durante el escenario de quema viva.
