El Gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, promulgó un proyecto de ley el martes que convierte en delito grave realizar un aborto con sentencia de hasta 10 años de prisión y una multa de 100 mil dólares como parte de un impulso agresivo en los estados liderados por republicanos en todo el país para reducir el derecho al aborto.
El proyecto de ley, que entra en vigor en 90 días después hace una excepción solo para un aborto realizado para salvar la vida de la madre.
Los defensores del derecho al aborto dicen que el proyecto de ley firmado por el gobernador republicano seguramente enfrentará un desafío legal.
Los defensores del derecho al aborto dicen que el proyecto de ley es claramente inconstitucional y leyes similares aprobadas recientemente en Arkansas y Alabama han sido bloqueadas por los tribunales federales.
