Una mujer identificada como Helen Rhodes, viajaba con su familia como parte de una «Nueva Aventura».
Juntos regresaban a Gran Bretaña después de haber pasado 15 años viviendo en Hong Kong.
Así, sólo unas horas después de haber iniciado el vuelo, descubrieron que Helen no respondía y no pudo ser reanimada después de fallecer mientras dormía.
Cargados de una pena infinita, los destrozados hijos de la mujer y su esposo se mantuvieron sentados junto a ella durante las ocho horas restantes del vuelo hasta que aterrizaron en Frankfurt, Alemania, describió un amigo de la familia.
Una lamentable tragedia.