El presidente Donald Trump anunció su intención de reabrir la famosa prisión de Alcatraz, cerrada hace más de 60 años por su alto costo de operación.
Ubicada en la bahía de San Francisco, la isla fue transformada en museo, pero Trump ahora quiere convertirla nuevamente en cárcel para “los delincuentes más peligrosos de Estados Unidos”.
A pesar de que existen ya 15 prisiones federales de máxima seguridad, como ADX Florence en Colorado, donde está recluido ‘El Chapo’ Guzmán, Trump considera que Alcatraz puede jugar un papel simbólico y estratégico.
Sin embargo, el plan enfrenta críticas debido a los enormes costos de reactivación.
En su cierre en 1963, operar Alcatraz costaba casi tres veces más que cualquier otra prisión, ya que todo debía ser transportado por bote.
Hoy, las reparaciones podrían costar más de 50 millones de dólares.
La propuesta genera debate sobre si vale la pena reabrir una prisión tan costosa cuando ya existen instalaciones más modernas y seguras.