La situación de calle se convierte en una dura realidad que parece cobrar fuerza día tras día en nuestra región. Presentamos la historia de un puertorriqueño en el noroeste de Arkansas quien asegura que tras huir de los devastadores estragos que dejó el huracán María en su tierra natal llegó a nuestra zona con la esperanza de crecer pero consiguió otra realidad.
José Santos, conocido como «Kenny» en las calles de Fayetteville, es un puertoriqueño de 21 años quien llegó al noroeste de la región buscando un nuevo hogar en un intento de refugiarse y establecerse.
«A veces es bien dificil sobrevivir porque estan de mal humor pero es buen ambiente,” dijo Santos a las afueras del refugio 7 Hills.
Kenny lleva 3 meses en situación de calle quien asegura un amigo le brindaría la ayuda que necesitaba pero no paso. Ahora se debate la vida durmiendo en los diferentes refugios, camas prestadas o hasta tiendas de campaña. También asiste diariamente al centro de apoyo 7 hills el cuál le provee comida.
“Yo estuve bien los primeros meses pero despues mi licencia se expiró y ahora tengo que tener un par de documentos para sacar el State ID y pues es un poco difícil sin tener amistades, familia.»
Este joven debe pagar dos multas al estado para poder renovar su licencia de conducir y acceder a servicios públicos a pesar de no saber como hacerlo nada le hace borrar su sonrisa.
“Soy joven, soy muy joven y tengo muchos planes para lo que sueño y quiero completarlos,» destacó el conocido Kenny.
Espera poder tramitar sus documentos pronto para mudarse a otro estado y envia un mensaje a los jóvenes, «Haganle caso a lo que sus padres digan, uno piensa que es facil vivir una vida de adultos pero realmente no lo es.»
Pero la bondad nunca falta en los corazones, más adelante conocerán el esfuerzo que realizan organizaciones sin fines de lucro que trabajan para brindar ayuda a estos desamparados.
